Clint Eastwood es un genio, de eso no hay duda. No recuerdo siquiera una película suya que no me haya gustado; el tipo sabe como mezclar acción, emoción y estereotipos en una película, y desde luego, Gran Torino no fue la excepción.


Al poco tiempo, su primo Spider (Doua Moua), el líder de la pandilla, decidie darle una nueva oportunidad para iniciarse e intenta llevarse al muchacho a la fuerza. Inconscientemente, Walt salvaría a Thao de su primo, y más adelante a su hermana Sue (Ahney Her) de un grupo de pandilleros negros. Pronto, Walt descubriría que tenía más en común con los Hmong que con su propia familia, y entablaría una buena relación con Sue. Asimismo, la madre de Thao decide ofrecerle a su hijo como mano de obra para reformarlo y a modo de disculpas por sus acciones.
Walt desarrollaría una amistad con Thao, a medida que lo instruía para dejar de ser un niño y convertirse en un hombre, para pronto darse cuenta que ni ella ni su hermana podrían vivir tranquilos mientras Spider y su pandilla siguieran haciendo de las suyas. Tras una serie de incidentes y decisiones de las que llegaría a arrepentirse, Walt descubre que solo existe una manera de ayudar a sus amigos.
De más está resaltar la excelente actuación de Clint Eastwood, y el balance protagónico casi equitativo para cada uno de los personajes que le rodean. Eastwood supo ubicar a cada personaje en su lugar, dotándoles de personalidades fuertemente marcadas que les hacen únicos a lo largo de toda la película. La trama es sencillamente excelente, aunque en ocasiones un tanto predecible debido a la naturaleza del protagonista. A cada escena nos va mostrando las transiciones que sufre el personaje principal a lo largo de toda la historia, y como influyen a su vez en la misma y en el resto de los personajes.
Aunque el desenlace parece ser de lo más predecible y canónico, en los instantes decisivos pega un giro inesperado que le convierte en un final dramático e impredecible. A pesar de ser una trama sencilla y sin muchas vueltas, sabe explicarse perfectamente a lo largo de sus 115 minutos de duración. En otras palabras; excelente película, con una excelente trama, un final inesperado y un director / protagonista fuera de serie. Es sin duda una de esas joyas que se hacen recordar cada vez que recorremos los pasillos del Video Club.
Puntuación final: 10/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario