Definitivamente, una de las mejores películas que vi en los últimos tiempos. Jack Nicholson y Morgan Freeman protagonizan esta excelente película del director Rob Reiner, que nos enseña que a veces la avaricia y el dinero no son suficientes para alcanzar la dicha.
Carter Chambers (Freeman), un mecánico de clase media, es diagnosticado con un cáncer terminal que requiere de los más avanzados métodos para su tratamiento. Por otra parte, Edward Cole (Nicholson), un magnate multimillonario dueño de la cadena de hospitales donde es internado Carter, se le diagnostica la misma enfermedad. Debido a la estricta política del hospital de permitir a dos pacientes por habitación sin excepciones, Edward es obligado a compartir la habitación con Carter, de modo que no generara disturbios con las relaciones públicas.
Aunque en un principio Edward se negaba a compartir cuarto con Carter, pronto entablarían una amistad que marcaría el inicio de una aventura que ninguno hubiera soñado con realizar. Basándose en los ejercicios de un profesor de filosofía de la secundaria, Carter comenzó a desarrollar un listín denominado "Antes de partir" (Bucket list); un conjunto de cosas que uno se propondría hacer antes de abandonar este mundo. Tras haber sido informados de que su esperanza de vida no sobrepasaría el año en ninguno de los dos casos; con el dinero de Edward y la lista de Carter, ambos podrían realizar sus sueños pendientes.
De ésta manera, ambos se embarcan en una aventura a través del mundo, donde recorrerían lugares exóticos y maravillosos, realizando tanto las fantasías de Carter como los caprichos -muchas veces disparatados- de Edward. Un estrecho lazo se forjaría entre ambos entre discusiones, lamentos y tribulaciones; a medida que Edward descubriría que el dinero no es lo único importante en éste mundo.
Excelente protagonismo de dos excelentes actores en un film cargado de emociones y humoradas de tinte sarcástico e irónico, que se dejan apreciar durante toda la película sin llegar a opacarla, convirtiéndola en una obra admirable en todos los sentidos. Ambos lograron convertir a sus personajes en personas cotidianas y de la vida real, destacando en particular la calidad casi soberbia del talento actoral de Nicholson.
La trama va teniendo lugar a medida que la historia transcurre, tornándose cada vez más atrapante y cautivadora; mientras los maravillosos escenarios que se muestran llegan a adoptar un carácter secundario a medida que comenzamos a conocer a los personajes. Excelente desenlace por sobre todas las cosas, que logra colocar el punto final a una maravillosa joya que emociona y da que hablar.
Puntuación final: 10/10
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